domingo, 18 de octubre de 2009

En el cielo, las estrellas...

Día de la Madre. Reunión familiar de los domingos, con besos, regalos y alegría. Hijos y nietos halagan a las madres y no les permiten hacer ningún trabajo. ¡Hoy son las reinas del hogar!

Al atardecer todos vuelven a sus casas. Lejos ya las horas del bullicio y de los juguetes esparcidos por el piso, los nonos se quedan tomando el té en el living mientras miran un álbum de fotos.

En él, dos fotografías se destacan: son imágenes de las madres de los nonos. Junto a ellas, una hoja amarillenta reproduce un texto bellísimo. Está copiado a mano por el nono cuando iba a la escuela primaria, en elegante cursiva dibujada con plumín y tinta china.

El nono lee en voz alta:

Retrato de mi madre

Hay una mujer que tiene algo de Dios por la inmensidad de su amor y mucho de ángel por la incansable solicitud de sus cuidados.

Una mujer que siendo joven tiene la reflexión de una anciana y en la vejez trabaja con el vigor de la juventud.

Una mujer que si es ignorante descubre los secretos de la vida con más acierto que un sabio y si es instruida se acomoda a la simplicidad de los niños.

Una mujer que siendo pobre se satisface con la felicidad de los que ama y siendo rica daría con gusto su tesoro por no sufrir en su corazón la herida de la ingratitud.

Una mujer que siendo vigorosa se estremece con el vagido de un niño y siendo débil se reviste a veces con la bravura del león.

Una mujer que mientras vive no sabemos estimar porque a su lado todos los dolores se olvidan, pero después de muerta daríamos todo lo que somos y todo lo que tenemos por mirarla de nuevo un solo instante, por recibir de ella un solo abrazo, por escuchar un solo acento de sus labios.

De esa mujer no me exijáis el nombre si no queréis que empape con lágrimas vuestro álbum porque ya la vi pasar en mi camino.

Cuando crezcan vuestros hijos leedles esta página y ellos, cubriendo de besos vuestra frente, os dirán que un humilde viajero, en pago del suntuoso hospedaje recibido, ha dejado aquí para vosotros y para ellos un boceto del retrato de su Madre.

Monseñor Ramón Ángel Jara Ruz
(Chileno; 1852-1917)

-Pensar que cuando lo copié no podía comprenderlo como ahora –dice el nono.

-Es cierto –responde la nona. Cuando uno es chico no piensa en ciertas cosas… Pero no te entristezcas. Es mejor agradecerles la vida que nos dieron, recordar el amor que nos prodigaron; los consejos y cuidados que nos brindaron.

-¿Sabés? Aún resuenan en mis oídos las palabras que mi madre me dijo unos meses antes de su partida: “Pase lo que pase, nunca olvides que te amé desde el primer momento en que te anunciaste a la vida…” Esa fue mi fortaleza en los momentos difíciles.

-¡Claro, el amor de una madre nunca nos deja! ¿No has observado el cielo de noche? Tengo una idea alocada… Creo que en cada estrella hay una madre que desde lo alto sigue cuidando a sus hijos, con la misma devoción que tuvo por ellos en esta vida.

- Quizás no sea una idea tan alocada. ¿Quién puede negártelo con fundamento?

La noche se asoma por el ventanal. Los nonos se toman de las manos y miran el cielo, en silencio. En lo alto, dos estrellitas muy brillantes titilan.

-¿Serán ellas? –pregunta el abuelo.

-¿Y vos qué creés?

Entonces, esbozando una sonrisa cómplice, el nono responde: “¡Yo creo que es cierto!”



¡Ahora, para todas las mamás del mundo, un regalito especial en su día !


sábado, 15 de agosto de 2009

¿Qué es la Patria?


Celeste, la hija menor de los nonos, es la maestra que tiene a cargo la preparación del acto escolar del 17 de Agosto. Ese día se conmemora en nuestro país el fallecimiento del Gral. José de San Martín , Padre de la Patria y uno de los Libertadores de América.


Mientras organiza los últimos detalles revisando carteles y láminas, Joel le pide a su mamá que responda una pregunta para completar sus tareas:


-Mamá, para vos, ¿qué es la patria?


-La Patria es mucho más que la tierra que pisamos, el agua que corre por nuestros ríos y arroyos, el cielo que miramos cada día... La Patria somos todos y cada uno de nosotros, que la queremos y deseamos construirla con trabajo, estudio y alegría todos los días. La Patria está donde nos acompañan los afectos...


Entonces, la nona, que está cebándole unos mates a Celeste, recuerda que tenía varias poesías copiadas en un cuadernito, entre las que estaba una de Julia Priluzky Farny, una poetisa nacida en Ucrania que adoptó la ciudadanía argentina y amó esta Patria, que fue la suya.


La nona busca y rebusca hasta encontrar esta bellísima poesía, y se las lee en voz alta, con gran emoción...



LA PATRIA

Se nace en cualquier parte. Es el misterio,

-es el primer misterio
inapelable-

pero se ama a una tierra como propia

y se quiere volver a sus
entrañas.

Allí donde partir es imposible,

donde permanecer es necesario,

donde el barro es más fuerte que el deseo

de seguir caminando.

Donde las manos caen bruscamente

y estar arrodillado es el descanso,

donde se mira al cielo con
soberbia

desesperada y áspera,

donde nunca se está del todo solo,

donde cualquier
umbral es la morada.

Donde se quiere
arar. Y dar un hijo.

Y se quiere morir, está la patria.

--------------------Julia Prilutzky Farny


-¡Cómo me conmueve esta poesía! -dice la nona. Me llena de entusiasmo saber que hay personas tan sensibles como para expresar con palabras ideas tan profundas, tan difíciles de definir. La leo una y otra vez, como si nunca antes hubiese posado mis ojos en ella. Imagino que San Martín experimentó esa misma pasión en cada una de sus acciones...

-¡Qué reflexiva estás hoy, mamá! -acota Celeste. Si seguís así, te llevo a la escuela para que des un discurso. ¡Y eso que aún no dije ni una palabra de que nuestro prócer también fue padre y abuelo! ¿A que se te caen las lágrimas?

-¡Reíte, nomás! ¡Seguro que iré al acto a rendirle homenaje al Gral. San Martín! ¡No me lo perdería por nada del mundo!



¿Sabías que...?

... El domingo 16 de agosto de 2009, en el suplemento Turismo del diario La Capital de Rosario, página 7, se publicó EL VIAJE DEL LECTOR > Cruce de los Andes, donde la Sra. Gladys T. Rosales relata su experiencia titulándola "Sueños a lomo de mula". ¡Para no perdérsela!

... Quienes deseen revivir la emocionante epopeya participando como lo hizo esta lectora, puede visitar el sitio web Cruce de los Andes a lomo de mula, de la Asociación Cultural Sanmartiniana "Cuna de la Bandera".

... El estreno del filme "San Martín. El cruce de los Andes" se prevé para el 2010, año del Bicentenario. En esta película, que es una coproducción del Canal Encuentro, Canal 7 y el INCAA (Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales), el actor Rodrigo de la Serna interpreta al Gran Capitán. Dirigido por Leandro Ipiña, cuenta con una gran producción. Aquí va un adelanto...



...La TV Pública presentará el 17 de Agosto a las 23 hs. un programa especial, "Seamos libres", en conmemoración del 159º aniversario del fallecimiento de nuestro prócer. El mismo incluirá un repaso de la vida del héroe y presentará momentos del rodaje de la película citada en el párrafo anterior, y de otros filmes. Contará con testimonios de historiadores, del director de la película y del presidente del Sistema Nacional de Medios Públicos, Tristán Bauer.


viernes, 7 de agosto de 2009

¡Un feliz día compartido!

Los hijos de los nonos trabajan muchas horas por día.
Mariano, el hijo mayor y su mujer, Alejandra, padres de Joaquín, Camila y Victoria, tienen un negocio que atienden desde las ocho de la mañana hasta las veinte.
Celeste, la hija menor, es docente y su esposo, Jairo, médico. Son los padres de Joel y Leandro.
Por eso es tan frecuente que los niños pasen con sus abuelos maternos o paternos buena parte del día, desde pequeñitos.

El viernes por la noche, reunida la gran familia, las jóvenes parejas comentan a los nonos la culpa que les crea tener que apartarse de los chicos tanto tiempo. Mas la necesidad de mantener a sus familias de un modo digno, sin lujos ni privaciones, obliga actualmente a sacrificar algo muy importante: la presencia de los papás.

La nona escucha con atención lo que dicen y medita en silencio. Ella sabe que el sentimiento de culpa culminará en un intento de compensación... Todo puede confundirse en estos días en que las publicidades de la TV, la radio, la web, recuerdan que se festeja el "Día del Niño" -o el mes del niño, según la conveniencia de los comerciantes, pues muchos padres aún no cobraron sus sueldos...

El ataque de culpa por el tiempo no compartido puede ser un mal consejero. La preocupada abuelita ha visto muchos tristes ejemplos. Ya perdió la cuenta de las veces que escuchó a muchos matrimonios preguntarse:
-¿Con qué compensaremos a Fulanito?
-¿Qué le regalaremos a Menganito para demostrarle que lo queremos inmensamente?
-¿Y si le compramos a Zutanito la Wii que tanto nos pidió? (¿Aunque por nuestra culpa, por nuestra gran culpa, por nuestra grandísima culpa -y falta de atenciones- haya repetido de grado, tenga severos problemas de conducta y no respete ninguna autoridad?)
-En definitiva, ¿qué hacemos con Perenganito el Día del Niño?

¡Tremendo problema!-imagina la nona. No sólo no les brindan tiempo suficiente, sino que creen que esa carencia puede llenarse con objetos...

¿No es mejor tratar de que los niños comprendan con hechos que lo importante es la calidad del tiempo compartido?

Pero, ¿cómo podemos hacerles entender eso, si muchas veces, cuando padres e hijos están juntos, parecen extraños?

¿Hablamos con los chicos para saber qué les gusta, qué los conmueve, cuáles son sus sueños, sus temores, dudas y deseos?

¿Les enseñamos los juegos de nuestra infancia? ¿Intentamos aprender los que ellos juegan?

Compartir actividades fortalece lazos y es fuente de satisfacción familiar.

Mariano, Alejandra, Celeste y Jairo ya se están despidiendo, cuando la nona les dice:

- Los esperamos para festejar el Día del Niño en casa este domingo, y después de almorzar, los abuelos llevaremos a los más chiquitos de visita...

-¿A dónde, mamá? -preguntan Mariano y Alejandra.

-A un lugar donde hay chicos con los que la vida no ha sido tan bondadosa... Visitaremos un hogarcito donde hay nenes huérfanos. Ya juntamos un bolsón con ropas y juguetes que, limpitos y en condiciones, van a servir para dibujar sonrisas en muchas caritas.
Este es un día para enseñarles a valorar lo que tienen: familia, amor, cuidados y, además,juguetes y cosas lindas. Es un día para enseñarles a compartir, a dar lo que les gusta y no lo que les sobra; a brindar su tiempo y su cariño.
Y bien, ¿me entienden ahora de qué hablo cuando digo que a los chicos hay que darles tiempo con calidad?

- Ehhhhhhhhhhh, mamá... ¡Si nadie se quejó!-acota Mariano-.Y te digo más,el domingo no van a ir solos. ¡Nosotros los vamos a acompañar! ¡Y llevaremos nuestros queridos juguetes de la infancia!

Con el rostro iluminado por la felicidad, la nona bromea:
-¡Esos son mis pichones!¡Ja,ja,ja!

¡Ahora, la yapa!

Chicos modernos

Nadie nos puede negar
que los tiempos han cambiado
imprimí esta información:
¡Ahora los chicos chateamos!

Podemos de MP3
música de moda bajar,
mirar cine en DVD
enviar cartas por Fax.

Sabemos escanear fotos,
de Internet juegos bajamos.
En el siglo veintiuno,
¡cuántas cosas han cambiado!

Pero, a pesar de los mails
y tanta tecnología
los chicos necesitamos
días de sol y alegría.

De un cajero automático
quisiéramos sacar
vales que garanticen
tiempo de felicidad.

Cocinaré en microondas
un futuro atractivo,
con sabor a libertad
para todos mis amigos.

Le pondré a mi PC,
en forma muy urgente,
contra la injusticia
un antivirus potente.

Silvia Zurdo

domingo, 26 de julio de 2009

26 de julio: ¡Una fecha para festejar!

Ruido de papeles. Cintas de colores. Lápices, fibras y fibrones sobre la mesa. Trabajo arduo. Chicos apurados. Un aviso: "¡Ahí vienen!". Un grito a coro:"¡Feliz Día de los Abuelos!"

Los nonos, emocionados, reparten besos, abrazos y -por qué no- algunos caramelos, mientras miran los dibujitos que les hicieron sus nietos. Poco importa si alguno les resulta un garabato ininteligible. Su autor sabrá describírselos con lujo de detalles en cuanto le brinden la oportunidad. Cada obra de arte infantil tendrá su sitio de honor en la casa de los nonos...

La alegría de la unión familiar, el cariño, el respeto y la gratitud que cada uno de los integrantes manifiesta a sus mayores, les regocija el alma y los incita a sentirse queridos, necesarios, valiosos.

¿Saben por qué se celebra hoy el Día de los Abuelos?
Porque el 26 de julio la Iglesia Católica conmemora la festividad de Santa Ana y San Joaquín, padres de la Virgen María y abuelos de Jesús. La fecha fue propuesta en el año 2000 por el Papa Juan Pablo II.

No todos los países lo celebran en esta fecha: EE.UU. en septiembre; México en agosto; el 26 de julio en España, Cuba, Nicaragua, Argentina...

En estos tiempos en que los hogares se ven acosados por las obligaciones laborales para asegurar la subsistencia, es fundamental el papel desempeñado por los abuelos como colaboradores en el cuidado y orientación de los niños y adolescentes de la familia, y como factores vinculantes entre sus miembros.

Sin embargo, no siempre se valora y aprovecha la sabiduría de su experiencia. Peor aún, conforme van pasando los años, estamos tan inmersos en el vértigo vital que nadie dispone de unos minutos para escuchar atentamente alguna historia de su juventud, tener una conversación amable, darle una tierna palmada en el hombro, o decirle simplemente "¡Te quiero!"

Es mucho lo que los abuelos pueden hacer aún, no sólo dentro de su círculo familiar, sino en iglesias y templos, asociaciones vecinales, centros de jubilados, clubes barriales, talleres de arte, hospitales, hogares de huérfanos, etc.

Una vez, la nona leyó esta frase en un señalador: "El agradecimiento es la memoria del corazón". Es muy noble ser agradecidos. Por los momentos pasados, presentes y futuros... ¡Aprovechemos este día y cada día! Alegremos el alma de nuestros abuelos regalándoles una medicina valiosa, de amplio espectro y sin contraindicaciones:¡AMOR!

La nona y las TIC´s


Mirando la TV, la nona descubrió la Fundación Papelnonos, un hermoso ejemplo de inserción social de adultos mayores, que construyen sus propios instrumentos musicales con papeles y goma de pegar; crean sus propias letras y músicas, y ofrecen recitales en escuelas. Nuestra querida nona buscó en Internet y descubrió este link para que puedan conocer de qué se trata...




¡También halló una red social para abuelos bloggeros! Se llama Abuelos en la red y en su página principal dice¨"Un espacio para compartir experiencias en el cual personas mayores hagan uso de la tecnología y genere el intercambio generacional". Fue creado en 2009 por la Universidad de la Punta, San Luis, Argentina. ¡A visitarlo!



Si desean saber más acerca de los Derechos de la Tercera Edad y otros temas de interés, aquí va un enlace a Geronto Vida, la página del Ombusdman de la Tercera Edad. (En la solapa SUS DERECHOS encontrarán: Los derechos de la Tercera Edad).




Un gran abrazo. ¡Hasta la próxima!

domingo, 7 de junio de 2009

Hechos y palabras...

No es fácil ser abuelos modernos. ¡Pero es divertido! Deben aprenderse muchas cosas para poder entender los cambios que se producen en el mundo y comprender a las generaciones más jóvenes.

Algo que éstas observan con atención en los adultos es la coherencia (o no) entre lo que dicen y lo que hacen. ¿Cómo pedirles que no ensucien el piso si cuando caminamos por la vereda arrojamos (y no en el cesto, precisamente) papeles de caramelos, folletos de promociones, pañuelos descartables,...? En estos tiempos, chicos, adolescentes y jóvenes desenmascaran a los hipócritas... piden y promueven un cambio. Quien aconseja debe predicar con el ejemplo y colaborar en la búsqueda de soluciones a los problemas.

Hoy la nona, ayudando a sus nietos a encontrar material de estudio sobre el cuidado del ambiente halló un video que es toda una alhajita. Quiere compartirlo con ustedes porque cree que nadie debe privarse de ver y escuchar a los niños (que -se dice- son el futuro de la humanidad)intentando defender a nuestra gran casa, la Tierra.

Un ejemplo de ello es Severn Cullis-Suzuki. Esta perseverante canadiense fundó la Organización Infantil del Medio Ambiente(Environmental Children´s Organization:ECO), cuando todavía cursaba la escuela primaria... ¡y no había cumplido su primera década!

En 1992 Severn tenía apenas 12 años. Asistió a la Cumbre de Medio Ambiente y Desarrollo "The Earth Summit"(celebrada por la ONU en Río de Janeiro, Brasil), junto a otros tres chicos: Vanessa Suthie, Michelle Quigg y Morgan Geisler.

Su discurso dejó perplejos a todos los miembros allí presentes... Aún hoy, observar el video o leer sus palabras nos hace erizar la piel.

Lo paradójico es que ese discurso tenga tanta vigencia...
¿Por qué ocurre ésto?
¿Será que sus planteos no fueron atendidos? ¿Acaso esos adultos simplemente la oyeron, pero no la escucharon? (No es lo mismo percibir sonidos con el oído que prestar atención a lo que se oye.)
¿Por qué "medio" ambiente? ¿Nos queda la mitad del que alguna vez conocimos?

Hoy, Severn es adulta y sigue su lucha con la convicción que la caracterizó a tan temprana edad. Lucha porque nuestro planeta continúa padeciendo los males provocados por seres humanos que,aunque se autodenominan racionales, destruyen por ambición, avaricia y soberbia el hogar que nos pertenece a todos.

Hechos y palabras. Imperdible. Para que lo reflexionen en familia y con amigos.



Para finalizar, la nona pregunta: ¿qué hacen cada día para cuidar el suelo, el agua, el aire y los seres vivos? ¡A escribir un comentario!

domingo, 31 de mayo de 2009

¡Un bello día!


Es un frío domingo otoñal. Cae el sol en la tarde rosarina.

La nona sirve el chocolate con churros caseros. Sí, con esos churros doraditos, crujientes y rellenos con dulce de leche que sólo ella hace tan ricos.


Los chicos están sentados a la mesa, junto al ventanal, y ven regresar a sus vecinos. Algunos vienen de la casa de los parientes, otros del parque, o del cine. Pero todos coinciden en algo...


- ¡Mirá, nona, qué caras de "lunes" tienen los vecinos! -exclama Joaquín.


- Noni, ¿por qué a nadie le gusta el lunes? -pregunta Camila.


- No es que a la gente no le guste el lunes. El problema es lo que el lunes significa para ellos: volver a sus trabajos, a sus obligaciones, correr de aquí para allá para no perder el colectivo; cumplir con el jefe o con los clientes, tener escaso tiempo para estar con sus familias y divertirse.


- ¡A ver si entendí! -acota el nietito-. ¿Quiere decir que si el lunes fuera feriado, el "malo" de la película sería el martes?


-¡Así es! -responde la nona-. Cada día tiene sus momentos complicados, pero también nos trae alegrías. Deberíamos tomar nota de los momentos buenos, para leerlos cuando no estemos tan contentos. Muchas veces depende de nosotros que cada día sea un buen día...


-¿Cómo es eso, nona? -preguntan con una mezcla de curiosidad y asombro.


Y la abuelita les responde:

-Si creemos que nos va a ir mal, entonces será una jornada perdida desde el comienzo. Pero si cada uno pone todo de sí, puede resultar mejor de lo que jamás hubiéramos imaginado.

- ¿En serio, noni? -dicen los pequeños.


- Sí, queridos. Por eso hay que disfrutar cada día. Y si no le creen a su nona, escuchen lo que expresan los escritores y cantautores...



No existe un día más hermoso que el día de hoy

La suma de muchísimos ayeres forma mi pasado.

Mi pasado se compone de recuerdos alegres..., tristes...

Algunos están fotografiados y ahora son cartulinas donde me veo pequeño, donde mis padres siguen siendo recién casados, donde mi ciudad parece otra.

El día de ayer pudo haber sido un hermoso día...

Pero no puedo avanzar mirando constantemente hacia atrás.

Corro el riesgo de no ver los rostros de los que marchan a mi lado.


Acaso el día de mañana amanezca aún màs hermoso...

Pero no puedo avanzar mirando sólo el horizonte. Corro el riesgo de no ver el paisaje que se abre a mi alrededor.


Por eso, yo prefiero el día de hoy. Me gusta pisarlo con fuerza, gozar su sol o estremecerme con su frío, sentir cómo cada instante me dice: ¡Presente!

Sé que es muy breve, que pronto pasará, que no voy a poder modificarlo luego ni pasarlo en limpio... Como tampoco puedo planificar demasiado el día de mañana: es un lugar que todavía no existe.

Ayer, fui. Mañana, seré. Hoy, soy.


Por eso, hoy te digo que te quiero...


hoy te escucho...


hoy te pido disculpas por mis errores...


hoy te ayudo...


hoy comparto lo que tengo...


hoy me separo de tí sin guardarme ninguna palabra para mañana...


Porque hoy respiro, transpiro, veo, pienso, oigo, sufro, huelo, lloro, trabajo, toco, río, amo...


Hoy.


Hoy estoy vivo.


Como tú.




Elsa Isabel Bornemann (argentina)


"El niño envuelto"


Ediciones Orión



"

sábado, 2 de mayo de 2009

El cuento de la nona

Se acerca el fin de semana y la nona encontró en su biblioteca un cuento para leerle a su nieto.
A él le agradan los cuentos, y si son de fútbol, mejor. La hermanita puso cara de disgusto, dice que esos no son cuentos para nenas. Pero la nona sabe que aunque no lo demuestre, también le gusta un poquito el fútbol, sobre todo cuando el equipo favorito de la familia gana...
¿Vamos a leer el cuento que encontró la nona? ¡Dale! ¡Seguro que te va a gustar!

Señora, ¿me da la pelota?
Pablo era un buen chico. Pero la vecina no opinaba lo mismo. Claro que había mucha diferencia de edad: Pablo tenía 10 años y la vecina 50.
A Pablo le gustaba jugar a la pelota. A la vecina, no. Cuando volvía del colegio, después de hacer los deberes, el chico subía a la terraza de su casa y se ponía a patear contra la pared. De esa manera la pared se convertía en Maradona, Kempes, Bochini, etc. A veces, el murito no atajaba, o sacaba el córner, o rechazaba a la bartola y la pelota caía en la casa de la vecina. Y la vecina gritaba como Lorenzo o como Labruna cuando van perdiendo (también fumaba como Menotti). Entonces agarraba la pelota (peso y medida reglamentarios), se la llevaba a su cuarto y cuando Pablo bajaba para pedírsela sacaba tarjeta roja de toda su rabia y lo expulsaba de su casa.
- Señora, ¿me da la pelota? -decía Pablo cada vez que se le caía.
- Ya te dije que soy señorita -decía la vecina- y no te doy nada. Me rompiste una planta con tu pelota, me golpeaste en la cabeza, me ensuciaste la pared. ¡No te doy nada!
Normalmente pasaban una, dos y hasta tres semanas antes de que la vecina decidiera devolvérsela. Porque a decir verdad, al final se la devolvía. Aunque con tantas maldiciones y gritos que todo era un martirio. Además Pablo debía escuchar los reproches de sus padres, pues más de quinientas veces le habían dicho que no tirara la pelota a lo de la vecina.
Pero el fútbol es así: una pasión irrefrenable.
Un día -otro día- la pared rechazó violentamente y la pelota fue a parar a las tribunas, es decir, a la casa de la vecina. Justo cuando ésta se había sentado en el jardín a tomar el té. La pelota cayó sobre el pasto, como siempre. Pero ella, como siempre, mintió: "Me rompiste una planta. Me golpeaste en la cabeza. No te la devuelvo más". Y escondió la pelota. "Chico mal educado -pensaba-, chico sinvergüenza, chico de porquería."
Esa noche la vecina no podía dormir. Había quedado muy enojada con Pablo y no lograba conciliar el sueño. "No se la devuelvo màs", decía. La pelota estaba allí, sobre el piso. "Maldito fútbol", decía la vecina.
De pronto, la pelota dio un saltito. Después unos piquecitos. Después hizo unas gambetas. Después se elevó de emboquillada. La vecina saltó de la cama.
-¡Gol! -gritó la pelota.
Y pasó por sobre la cabeza de la vecina.
-¡Gol! -volvió a gritar la pelota.
Y otra vez pasó por sobre la cabeza de la vecina.
-¡Te atajé! -gritó la vecina.
Y atrapó la pelota en el aire.
-¡Te juego! -dijo la pelota.
-¡Te juego! -dijo la vecina.
Y jugaron. La pelota corría, gambeteaba, saltaba. La vecina se estiraba, embolsaba y hasta pateaba. La vecina no jugaba bien. Pero la pelota se dejó ganar. Cuando la vecina se cansó, contenta de haber ganado, se quedó dormida. Esa noche soñó que iba a un partido de fútbol y que ella hacía de réferi.
A la mañana, calladita, dejó la pelota en casa de Pablo. Y cuando éste volvió de la escuela, aunque se sorprendió, no pensó mucho en el asunto y subió a la terraza a jugar contra la pared. Vio que la vecina lo espiaba desde el jardín. Al anochecer dejó de patear. Inmediatamente se oyó la voz de la vecina:
-Nene, ¿terminaste de jugar?
-Sí, ¿por qué?
-Entonces, ¿me prestás la pelota?
HORACIO CLEMENTE (argentino)
¿Les gustó? Ahora, ¡vayan a preguntarle al abuelo y a papá en qué equipos (y en qué puestos o cargos) se desempeñaron los deportistas nombrados en el cuento!

viernes, 1 de mayo de 2009

¡BIENVENIDOS!



Hace muchos años mi abuela me dijo: "Al nacer, nadie trae un manual de instrucciones bajo el brazo que le enseñe cómo vivir... La vida es un continuo aprendizaje." ¡Cuánta verdad había en sus palabras!


Tan feliz fui en aquella época con mis abuelos, que si fuera presidente, enviaría un proyecto de ley al Congreso para lograr que todo niño tenga por lo menos un abuelito. Y le agregaría también una mascota y un parque muy extenso, donde pueda correr, jugar y treparse a los árboles frutales...


Cuando comencé a escribir este blog, pensé en hacer de él un lugar de encuentro para todas las personas que deseen compartir las cosas más sencillas y nobles; un sitio en el que los recuerdos afloren con alegría...


... donde todos aprendan de todos, y enseñen lo que saben, sienten y quieren;


... donde los chicos sientan que su palabra es valorada;


... donde los padres comprendan que las nuevas tecnologías pueden ser un maravilloso puente para encontrarse, compartir y maravillarse;


... donde los abuelos sepan que su experiencia y sabiduría será requerida frecuentemente, para conectarnos con nuestras raíces, vinculando el pasado y el presente a fin de construir un futuro común;

... donde cada uno pueda admitir que tiene alma de niño...



¡Espero que se sientan a gusto en mi blog, y participen siempre que lo deseen!



La nona